Los requisitos de máscara se están desvaneciendo en la historia de la pandemia. Pero cuando los niveles de COVID-19 son altos en mi área, todavía pongo una KN95 en el bolsillo antes de salir de casa. Quizás se pregunte: ¿Vale la pena usar una máscara si es el único que lo hace?

Sí, seguro que lo es. Así es como lo sabemos.

Todos los diferentes tipos de investigación — desde estudios de modelos hasta experimentos de laboratorio y estudios del mundo real en escuelas y en todos los estados— han demostrado que el enmascaramiento ayuda a prevenir la propagación del virus. Y si bien esos experimentos de laboratorio muestran que tener a todos enmascarados es la forma más efectiva de prevenir la propagación, también muestran que usar una máscara ayuda a proteger a la persona que la usa. Y cuanto mejor sea la máscara, más protección obtiene.

¿Cuánta protección? Depende de dos cosas:

• Filtro: Qué tan bien filtra la máscara los pequeños fragmentos de humedad que transportan el virus.

• Ajuste: Qué tan bien se ajusta la máscara a su rostro.

¿Quieres saber cómo se clasifica tu máscara? Revisa esta infografía. ¿Necesitas ver los números? Aquí tienes — los estudios detrás de ellos están aquí, aquí, aquí y aquí:

• Mascarilla de algodón: 30 - 56 % menos de probabilidades de infectarse que si no usa una mascarilla

• Mascarilla quirúrgica: hasta el 66% (mejor si se usa anudada y ajustada)

• Mascarilla KN95 o KF95: Hasta 85%

• N95: Hasta 95%

Entonces, si le preocupa contraer COVID-19, cúbrase. ¿Garantizará que no contraerá COVID-19? No. Pero es muchísimo mejor que nada.